La foto de DRIVE muestra a una madre sonriendo junto a su hija de nueve años antes de supuestamente inyectarle ketamina mientras estaba en el hospital.
Roula Pispirigou, de 33 años, fue acusada de matar a su hija mayor Georgina, quien murió en enero en el Hospital Infantil de Patra en Grecia.
Una madre de 33 años fue arrestada después de examinar el tejido muscular de Georgina, que reveló que a la bebé se le había administrado una dosis letal de ketamina que ningún médico le había administrado, dijo Proto Thema.
Las autoridades iniciaron una investigación sobre la muerte de sus otros dos hijos, Malena, de tres años, quien murió en julio de 2019 de insuficiencia hepática e iris, de seis meses, sospechosa de tener un defecto cardíaco.
Los funcionarios analizan ahora la misteriosa muerte de tres niños en una historia sorprendente que ha cautivado a Grecia.
La joven Georgina comenzó a sufrir una serie de convulsiones en abril de 2021, solo unas semanas después de la muerte de su hermana menor.
La niña fue hospitalizada y luego sufrió una insuficiencia cardíaca que le provocó tetraplejía.
Tras una larga estancia en el hospital, la joven falleció en enero de 2022.
Según documentos judiciales, una autopsia reveló que Georgina murió menos de 20 minutos después de administrarle una dosis letal de un fuerte anestésico.
Las enfermeras del Hospital Infantil Aglaia Kyriakou dijeron que Pispirigou estaba solo con Georgina en el momento de la muerte de la niña.
El 31 de marzo, la madre fue escoltada por la policía a un tribunal en Atenas para ser acusada.
Ella ha negado cualquier irregularidad relacionada con la muerte de Georgina, y su abogado sugiere que sospecha que la causa de la muerte de Georgina fue una negligencia médica.
La madre, que se negó a tener algo que ver con la muerte de los otros dos niños, solicitó más tarde su liberación.
Las autoridades creen que están cerca de determinar la causa de la muerte de los otros dos niños, y el médico forense descartará que hayan muerto por “causas patológicas”.
En entrevista con Mega TV, el médico forense Dimitris Galenderis señaló que en ambos casos había signos de asfixia.
Ahora la placa enterrada con Georgina, de nueve años, ha sido recuperada este sábado por el juez a cargo del caso, y se cree que arrojará luz sobre la muerte de la pequeña.